Haz clic en los elementos de nuestra botella y descubre la historia y el simbolismo de la cultura maya que la hacen única.

Tequila Iztic
La tapa de la botella representa la punta de una lanza de obsidiana, uno de los instrumentos que perduró durante milenios en la cultura azteca. Haciendo alegoría a la continua transformación de la humanidad, Iztic la adopta como símbolo de empoderamiento. Punta de obsidiana
Resplandecen dos símbolos arraigados en la cosmovisión maya: el sol y la luna. Personificados por el dios Kinich Ahau, y la diosa Ixchel, respectivamente. Estos dos astros, eternos compañeros en el cielo, reflejan el equilibrio y la dualidad presentes en la naturaleza y en la vida misma. Así en Iztic rendimos homenaje a la rica herencia cultural maya y a las fuerzas cósmicas que inspiran nuestra pasión por crear un tequila excepcional. Sol y la luna Maya Iztic Tequila
Iztic inspirado en Ice Stick en inglés, representa la pureza y firmeza del hielo. Su forma triangular evoca una estalactita, simbolizando frescura y precisión en cada detalle. Por eso, nuestra botella con forma de estalactita de hielo, no solo es un homenaje al hielo, sino también a una pasión que se disfruta fría, refinada y equilibrada. Ice stick Iztic Tequila
Nuestro logo rinde homenaje a una de las creencias más trascendentales de las culturas mesoamericanas: Quetzalcóatl, la legendaria Serpiente Emplumada. Esta deidad, mitad ave y mitad serpiente, simboliza la unión entre el cielo y la tierra, la dualidad entre el mundo físico y el espiritual. En su esencia, representa el equilibrio, el conocimiento y la transformación, valores que inspiran cada gota de Tequila Iztic. Quetzalcoatl Iztic Tequila
En la base de nuestra botella yace un legado ancestral: el Calendario Maya, una obra maestra de la astronomía y la espiritualidad. Este sistema calendárico, compuesto por el Tzolk'in de 260 días y el Haab' de 365, marcaba el ritmo del universo y guiaba tanto la vida cotidiana como los rituales sagrados. Juntos, formaban la Rueda Calendárica, un ciclo de 52 años que simbolizaba la renovación constante del tiempo bajo la vigilancia de deidades. Destacando el poder imponente de Kinich Ahau, dios del sol, y la grandeza mística de Ixchel, diosa lunar. Así es nuestro tequila: un tributo DONDE LA GRANDEZA Y EL PODER CONVERGEN. Calendario Maya Iztic Tequila